La Fira de la Sardina, organizada por la Confraria de Pescadors de Palma con el apoyo del Ajuntament de Palma, cerró su primera edición con un éxito rotundo. En solo cuatro días, del 15 al 18 de mayo, se consumieron más de 3.000 kilos de sardina mallorquina, una cifra que superó ampliamente las previsiones iniciales.

Fira de la Sardina Palma

Foto: Ajuntament de Palma.

La respuesta del público fue tan entusiasta que el viernes, segundo día de feria, ya se había agotado la cantidad prevista para toda la semana. Ante esta situación, tres embarcaciones adicionales salieron a faenar ese mismo día, pese a no ser jornada habitual de pesca, para garantizar el suministro de sardina fresca hasta el final del evento.

Domingo Bonnín, patrón mayor de la Confraria de Pescadors de Palma, celebró los resultados: “Sabíamos que la sardina mallorquina tenía potencial, pero la respuesta ha superado todas nuestras expectativas. Esta feria ha demostrado que el producto local tiene éxito, y que cuando la ciudadanía tiene acceso a él, lo valora y lo consume“.

Como muestra de compromiso social, la Confraria donó cerca de 90 kilos de sardinas no servidas a la Associació Tardor, entidad que trabaja con personas en situación de vulnerabilidad.

Miles de visitantes en la primera Fira de la Sardina

El Moll de Pescadors se llenó durante el fin de semana con miles de visitantes y más de 40 carpas dedicadas a la gastronomía, la cultura marinera, la artesanía, la música y las actividades infantiles. La sardina fue la gran protagonista y se consolidó como símbolo del producto de proximidad y de la tradición pesquera de Mallorca.

La feria contó también con la colaboración de numerosas entidades y empresas del ámbito institucional, social y cultural, lo que contribuyó a enriquecer su programación y asegurar una experiencia diversa y participativa. Todo apunta a que este evento ha llegado para quedarse en el calendario festivo de Palma.