2023 ha sido el año en que se han producido más incendios en las viviendas en Mallorca. El año pasado se declararon 484 fuegos en los hogares mallorquines, más que cualquier año desde que se tienen registros. En 2022 hubo 479, 452 en 2021, 311 en 2020 y 379 en 2019. Un dato que confirma una tendencia: cada año hay más incendios que el anterior.

Por todo esto, los Bomberos de Mallorca hacen un llamamiento a la prevención y a la precaución para evitar los incendios a los hogares. No solo por los daños materiales que pueden causar, sino porque pueden tener consecuencias fatales. La media de muertes en incendios en las viviendas es de casi una persona y media en el año (1,46).

En 2023 murió una persona por culpa del fuego en hogares en Mallorca. Y este año ya ha habido una nueva víctima, a principios de enero. Un hombre mayor con movilidad reducida murió en un incendio en Llucmajor.

«Nos tenemos que concienciar que los incendios en los hogares son muy peligrosos y pueden llegar a tener consecuencias catastróficas o fatales. Tenemos que hacer todo el que esté en nuestras manos para evitarlo», asegura el director insular de Emergencias, Joan Fornàs.

Otoño e invierno, los más peligrosos

incendios casas mallorca 2023

El cuerpo de emergencias del Consell de Mallorca también destaca que los meses en que hay más incendios en las casas son los de otoño e invierno, cuando llega el frío. El mal uso que se hace de los sistemas de calefacción los convierte en un peligro: son los mayores causantes de fuego en las casas. Una gran parte de los accidentes pasan cuando se dejan estufas o braseros encendidos durante la noche sin vigilancia. Otra causa de incendios es fumar en la cama.

Una de las recomendaciones que se hacen desde el Servicio de los Bomberos de Mallorca es la instalación de sistemas de detección de humos. Se trata de una medida económica, sencilla y muy eficiente. Estos aparatos avisan enseguida que detectan humo en la habitación. Son muy efectivos, sobre todo si hay un incendio mientras se duerme. Es una medida muy habitual al resto de Europa e incluso obligatoria en el Reino Unido.

Las franjas de edad más vulnerables, en el caso de incendio, son los menores y la gente mayor. La mayoría de defunciones por fuego a viviendas pertenecen a estos colectivos. En el caso de los más mayores, la movilidad reducida y las enfermedades mentales (Alzheimer), los hace todavía más vulnerables.