El último análisis de Quaderns Gadeso sobre la temporada alta de 2023 pide precaución en las previsiones del sector debido a la elevada inflación, la crisis del sector energético, la guerra de Ucrania, el Brexit y la amenaza de recesión en Alemania y el Reino Unido

La amenaza de una desaceleración económica en mercados emisores como son Alemania y Reino Unido está bajando los ánimos de cara a la temporada alta 2023 en Mallorca. Aunque las previsiones inicialmente son buenas, el informe Quaderns Gadeso pide cautela ya que la situación internacional marcada por la guerra de Ucrania, la inflación, la crisis energética, el Brexit y la amenaza de desaceleración económica en mercados como el alemán y el británico podría alterar estas buenas previsiones.

Según alerta el último informe, la recesión económica conllevaría una contracción del consumo y del gasto, lo que incide, directamente, en la capacidad de las personas para viajar y consumir durante sus vacaciones en los destinos.
Gadeso se basa en 600 entrevistas realizadas entre los días 10 y 25 de mayo por lo tanto sus resultados corresponden con la opinión del empresariado turístico balear justo antes de la celebración de las elecciones municipales y autonómicas del pasado 28 de mayo.turismo

Subida de precios y aumento de la rentabilidad empresarial

En este contexto de incertidumbre se prevé un incremento de la actividad (19 %) y una subida de los precios (17,5%), con lo cual aumentaría la rentabilidad empresarial (+6 %). Si bien, se observa, es posible que estos datos se vean alterados en función de la respuesta empresarial balear ante la formación del nuevo Govern que encabezará la presidenta del PP en las islas, Marga Prohens. Lo que sí expresan tres de cada diez empresarios es su incertidumbre ante la temporada.

De acuerdo con las reservas del Reino Unido y Alemania y el “prometedor inicio” de la temporada, la previsiones de rentabilidad en hoteles, apartamentos, alquiler vacacional y turismo rural son optimistas, con un cierto grado de incertidumbre (+8 %). Se prevé que suba la ocupación hotelera un 21 % y una subida de precios y de los costes, tanto por la inflación como por el aumento de los costos laborales, que notarán más las pequeñas empresas.

También casi el 25 % de los empresarios de alojamiento turístico en Mallorca se muestran inquietos e inseguros, sobre todo por la evolución de los precios al alza.

Asimismo el informe afirma que para mejorar la rentabilidad es necesario ir más allá de una temporada alta intensiva alargándola después de julio y agosto.

Preocupación en la oferta complementaria

Respecto a la oferta complementaria —restauración, comercio turístico, transporte y servicios de ocio y deportivos—, otro gran pilar de la actividad turística en Baleares, las perspectivas de rentabilidad no son tan positivas (+4 %). Se estima que la actividad aumentaría un 14 %; los precios, un 17 % y los costes, un 19 %.

Una inflación desmesurada y la competencia del todo incluido hace que una parte importante de los visitantes se limiten a consumir en los hoteles. Lo que afecta a un sector compuesto sobre todo por pymes y autónomos. En el caso de los empresarios de la oferta complementaria, más de un 35 % se muestran preocupados ante la incertidumbre.