La presidenta del Govern, Francina Armengol, lanzó un plan de choque de 25 medidas con una inversión de 100 millones de euros para atenuar la crisis que afecta a Balears por la invasión rusa en Ucrania.

Las iniciativas se relacionan con la atención humanitaria, con el acompañamiento a las familias y los colectivos vulnerables y con la protección del tejido productivo, especialmente de los sectores más afectados, como por ejemplo el del transporte y el primario.

“La pandemia nos ha dejado claro que el camino correcto era el que habíamos elegido. Que había que seguir reforzando los servicios públicos. Que teníamos que reafirmar nuestro compromiso con un desarrollo sostenible y circular, con la promoción de nuevas industrias, y con la modernización de todos los sectores y la formación de profesionales cada vez más cualificados, mejor pagados”, ha explicado Armengol, que ha querido trasladar un mensaje de confianza porque “si hemos superado lo que hemos superado, nos merecemos creer en nuestras capacidades como sociedad resolutiva y comprometida”.

Balears se convierte, así, en la primera comunidad autónoma en aprobar un plan de acción que incorpora ayudas directas y políticas de protección de las familias. Las medidas anunciadas movilizan más de 70 millones de euros de forma directa y 36 más a través de líneas de liquidez y financiación.

Medidas sociales:

  • Incremento del 15 % de la cuantía de la renta social garantizada.
  • Incremento de la inversión destinada a ayudas comedor.
  • Cuatro convocatorias de nuevas subvenciones para paliar la pobreza energética, garantizar alimentos, apoyar a personas vulnerables y financiación a los servicios sociales comunitarios para hacer frente a nuevas situaciones de emergencia social.
  • Refuerzo al personal docente, incorporando hasta 68 nuevos profesionales, para garantizar la integración y asumir la escolarización.
  • Ampliación de las frecuencias y los horarios del TIB desde la primera semana de abril; refuerzo del servicio de transporte ferroviario, doblando los trenes en hora punta; el compromiso de mantener las tarifas actuales del transporte público, y un bono de cinco euros para los nuevos usuarios de la tarjeta intermodal, tres medidas relacionadas con el transporte público que suman doce millones de euros.

Medidas para los sectores productivos:

  • Reducción de las tasas a las navieras que hacen transporte de mercancías.
  • Subvenciones directas para compensar el incremento del precio de los carburantes en el sector del transporte (5,6 millones de euros).
  • Establecimiento de cláusulas de revisión en los contratos del sector público con empresas de transporte.
  • Agilización de todas las instalaciones de energías renovables, reduciendo los trámites a la mitad.
  • Modificación de la normativa para permitir la revisión de precios de las adjudicaciones de contratos en curso ante el incremento de los costes de los materiales (al menos 37 millones de euros).
  • Ayudas al transporte de mercancías de materias primas en el sector primario.
  • Ayudas a las embarcaciones pesqueras para hacer frente a la subida del precio del carburante.
  • Exoneración a las embarcaciones pesqueras de las tasas portuarias en los puertos de las Islas Baleares.
  • Líneas de crédito y liquidez a través de ISBA para movilizar hasta seis millones de euros en empresas del sector primario.
  • Activación del fondo de reserva anticrisis de la PAC para el sector agrario y ganadero.
  • Bonos comerciales para estimular el consumo.
  • Aumento de las líneas de crédito y liquidez de ISBA para empresas no agrarias.
  • Alargamiento del vencimiento de los créditos de ISBA.
  • Establecimiento de cláusulas de revisión en los contratos del sector público para dotar servicios públicos.

Los 100 millones de euros anunciados complementarán el plan estatal, que incluye, según ha destacado la presidenta, muchas de las reivindicaciones de Balears que surgieron del Pacte de Reactivació, entre las cuales ha destacado el éxito que supone desvincular el precio de la electricidad del del gas o el alargamiento del vencimiento de los créditos ICO, de los cuales las empresas baleares tienen ahora mismo 4.900 millones de euros y que el Gobierno de España anunció que crecían en 10.000 millones más, con una previsión de que aproximadamente 400 lleguen a las Islas.

Además, Armengol ha celebrado que las ayudas directas a sectores como el primario o el transporte, el incremento del ingreso mínimo vital o las limitaciones a los precios del alquiler se hayan puesto en marcha, así como el aumento del bono social eléctrico, que permitirá que en las Baleares pasen de cobrarlo 15.000 personas a 22.000. Finalmente, la presidenta ha reivindicado la rebaja en el precio de los carburantes, una medida que supondrá para los consumidores de las Islas Baleares un ahorro de 43 millones de euros.

Con estos paquetes se espera revertir la espiral inflacionista y, de hecho, Armengol ha explicado que las previsiones económicas después de la aplicación de estas medidas pronostican que la recuperación iniciada después de la pandemia no solo continuará, sino que en el escenario más débil las Baleares crecerán, como mínimo, un 10 %.

Paralelamente, la presidenta ha recordado que el Govern está apoyando al Estado en la acogida de personas refugiadas y ha agradecido a la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca el ofrecimiento de 350 plazas de forma temporal. Armengol ha explicado que el Govern promoverá la acogida familiar y, por eso, se pondrán en marcha deducciones de IRPF para las personas que acojan refugiados o hagan donaciones para ayudar a las víctimas del conflicto.

La presidenta del Govern, Francina Armengol. Foto: GOIB.