Mallorca Rural ha presentado en el Museo del Calzado de Inca las conclusiones de un estudio sobre los costes y posibles usos de la lana. En él han concluido que la lana como tal no es un producto rentable hoy en día por los costes que supone, y que la capacidad de producción que hay en las islas no alcanza para que se puedan superar. Ante esta conclusión, el director general de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Fernando Fernández,  “es vital que se haga una segunda fase de estudio, enfocada en proyectos piloto sobre cómo aprovechar y revalorizar la lana como producto industrial”.

Hay encima de la mesa propuestas como que sirva como aislante térmico para las construcciones o para hacer compost, entre otros usos: “Hoy en día es un residuo costoso para la ganadería; tenemos que hacer que sea un recurso rentable y de futuro”, ha expresado el director general.

En este sentido, en la jornada sobre la lana celebrada en Mallorca se ha recordado que ahora mismo los costes de lavar y retirar la lana para su eliminación e incineración o para su venta al exterior son demasiado altos -además de los que supone el factor añadido de la insularidad- y suponen pérdidas para la ganadería ovina de las islas. De aquí que desde Mallorca Rural y la consejería se quieran llevar a cabo proyectos piloto conjuntos entre los grupos LEADER de las diferentes islas. Hay que recordar también que, durante la crisis por la Covid, se creó una ayuda específica pero puntual desde la consejería para recoger e incinerar toda la lana mientras los canales de venta estuvieron cerrados.

Por último, el director general ha explicado también que revalorizar la lana como producto industrial rentable “puede ser muy beneficiosa para el campo de las islas a medio y largo plazo, puesto que impulsaría el rebaño ovino y la diversificación de cultivos”, y que sería “todo un ejemplo de gestión ecológica”, puesto que evitaría incineraciones y haría que mucha más se aprovechara en Balears, en vez de tener que exportarse para su aprovechamiento: “En un contexto como el actual, con tanta incertidumbre en cuanto a los costes de transporte o de la energía, se tiene que valorar seriamente cerrar el círculo de la lana en nuestras islas”, ha concluido Fernández.