Ante la cercanía de la celebración de Sant Sebastià, patrono de Palma, el Govern balear salió a pedir prudencia y precaución a la ciudadanía en medio de la subida de contagios y tras haber cerrado cuatro locales por exceso de aforo en la fiesta de Sant Antoni que se celebró en el interior de Mallorca.
El Govern de las Illes Balears insiste en hacer un llamamiento a la precaución y a la responsabilidad individual y colectiva porque el virus continúa entre nosotros y se tienen que evitar riesgos.
De hecho, desde la Dirección General de Emergencias e Interior, conjuntamente con el cuerpo de inspección de turismo del Consell de Mallorca y las policías locales, se han hecho actuaciones en el marco de sus competencias para asegurar el cumplimiento de la normativa COVID.
En concreto, las actuaciones coordinadas por el Govern se han centrado en la víspera de Sant Antoni en los municipios que viven esta tradición y que lo habían cancelado, como por ejemplo Artà, Sa Pobla, Muro, Manacor, Sant Llorenç y Pollença. Como resultado de las inspecciones hechas, se han levantado varias actas y se procedió al cierre de cuatro establecimientos que incumplían el máximo del aforo permitido.
En este sentido, la consellera de Salut, Patricia Gómez, explicó que las posibles aglomeraciones espontáneas en las fiestas de Sant Sebastià pueden ser preocupantes vistas las imágenes de este fin de semana en pueblos como Sa Pobla.
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