La brecha salarial en Balears entre hombres y mujeres se ha reducido casi a la mitad en un año, situándose en un 7,4% según los datos oficiales de 2022, la tercera más baja de España tras Canarias (4,3%) y Ceuta y Melilla (5,8%). Sin embargo, desde UGT Illes Balears advierten que este descenso no refleja una mejora real en la igualdad de género, sino que está vinculado a factores estructurales del mercado laboral balear centrado en el sector servicios.

La portavoz de la Gestora de UGT Illes Balears, Xisca Garí Perelló, ha destacado el “fuerte” descenso de la brecha, que pasó del 13,7% en 2021 al 7,4% en 2022, en la presentación del Informe sobre discriminación salarial UGT 2025. Garí atribuyó esta bajada al impacto positivo de la Reforma Laboral, que ha beneficiado especialmente a las mujeres debido a su mayor presencia en empleos temporales y a tiempo parcial. Además, ha señalado que el aumento del salario medio femenino fue mayor que el masculino en 2022: las mujeres vieron incrementarse su salario anual en 3.710 euros hasta alcanzar los 26.054 euros, mientras que los hombres registraron un aumento de 2.257 euros, llegando a los 28.155 euros.

Sin embargo, Garí ha subrayado que la brecha salarial en Balears “es solo la punta del iceberg de desigualdades estructurales que afectan a las mujeres durante toda su vida laboral y también en la jubilación, condenándolas a una menor protección social y a mayores tasas de pobreza“.

Los roles de género, una de las causas de la brecha salarial en Balears

El informe presentado por UGT señala que la disminución de la brecha también se debe a las sucesivas subidas del salario mínimo desde 2019, aunque advierte que la desigualdad persiste en aspectos como los complementos salariales y las horas extras. En Balears, la brecha en complementos asciende al 11,4%, mientras que en las horas extras se dispara al 33,2%.

Garí ha destacado que estas desigualdades tienen raíces estructurales relacionadas con los roles de género y la carga de los cuidados familiares, que recae mayoritariamente en las mujeres, limitando sus oportunidades de ascenso y disponibilidad laboral. “Las mujeres siguen renunciando a progresar profesionalmente para asumir responsabilidades familiares, y esta realidad sigue afectando sus oportunidades laborales y sus salarios”, ha lamentado Garí.

Reivindicaciones sindicales

UGT reclama que el salario mínimo siga aumentando y que se calcule sobre el salario base para evitar la congelación salarial de los colectivos más vulnerables, especialmente las mujeres. Además, pide medidas más estrictas para controlar la igualdad retributiva, como inspecciones laborales y fondos específicos para hacer cumplir la normativa.

También propone la creación de una mesa de diálogo social en Balears para supervisar la aplicación de la legislación autonómica y estatal en materia de igualdad y planes educativos que fomenten la coeducación en centros públicos y privados.