El Govern de les Illes Balears ha emitido una resolución que prohíbe el uso comercial de los amarres concedidos para uso particular en los puertos autonómicos. Esta medida responde a la normativa estatal recientemente publicada, que permite a embarcaciones privadas de recreo cambiar temporalmente su uso a comercial. Esta resolución se ampara en las competencias exclusivas de la Comunitat Autónoma sobre el dominio público portuario.
Según la medida, cualquier utilización de estos amarres con fines lucrativos, como el alquiler turístico de embarcaciones privadas, será considerada una infracción grave. Esto conllevará la apertura de un expediente sancionador y la caducidad inmediata de la autorización de amarre. La normativa busca preservar el equilibrio entre amarres sociales, destinados a uso particular, y amarres lucrativos, que corresponden a actividades comerciales, señalan desde el Govern. Por ello, se reforzarán los controles para asegurar que los amarres se destinan exclusivamente al uso para el que fueron concedidos.
Los usos particulares y comerciales implican necesidades distintas
Ports de les Illes Balears (PortsIB), organismo dependiente de la Conselleria de la Mar i del Cicle de l’Aigua, destaca la importancia de mantener esta diferenciación, ya que los usos particulares y comerciales implican necesidades distintas y, en ocasiones, incompatibles. Además, la medida pretende garantizar la seguridad de las instalaciones y la protección del entorno litoral.
La resolución se publicará próximamente en el BOIB y ya está disponible en la web de Ports de les Illes Balears. Paralelamente, PortsIB ha solicitado a las entidades concesionarias que, en un plazo máximo de diez días, presenten una propuesta provisional que detalle el reparto de amarres según su uso, diferenciando claramente entre embarcaciones particulares y actividades profesionales, como chárter náutico o transporte marítimo no regular.
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