El Govern balear ha iniciado un ambicioso proyecto de reforestación en la finca pública de s’Alqueria Vella, situada en el Parque Natural de la Península de Llevant (Artà). La actuación prevé la plantación de 40.000 árboles y arbustos autóctonos y cuenta con una inversión superior al millón de euros, de los cuales la Fundación TUI Care Foundation aporta 550.000 euros.

El equipo del IBANAT que participa en las tareas de reforestación de s’Alqueria Vella. Fotos: CAIB.
Los trabajos, ejecutados por el Institut Balear de la Naturalesa (IBANAT), tienen como objetivo recuperar las zonas afectadas por incendios forestales y restaurar la cubierta vegetal del parque. La zona elegida para la nueva repoblación se encuentra cerca del camí dels Presoners y contará con especies propias de la flora balear, como el pi blanc (pino carrasco), el ullastre (acebuche), el aladern de fulla estreta (labiérnago), el llampúdol (aladierno balear), la mata (lentisco) y el garballó (palmito).
El conseller de Agricultura, Pesca i Medi Natural, Joan Simonet, ha destacado que “esta actuación es un ejemplo de cómo la colaboración entre el sector público y el privado beneficia a nuestro medio natural, ya que contribuye a restaurar los bosques, conservar la biodiversidad y reforzar la lucha contra el cambio climático“.
La reforestación de s’Alqueria Vella avanza en un terreno de alta complejidad ambiental
Todas las plantas utilizadas en la reforestación de s’Alqueria Vella proceden del vivero forestal de Menut (CEFOR), en Escorca, y se ha producido a partir de semillas autóctonas recogidas en localidades cercanas. El conseller Simonet ha destacado que “esta práctica permite preservar la diversidad genética de las especies y aumentar la capacidad de adaptación de la repoblación a las condiciones del terreno”.

La zona donde se trabaja presenta una elevada complejidad ambiental, ya que la regeneración natural del bosque no progresa por la falta de banco de semillas, la presencia de cabras asilvestradas y la pedregosidad del terreno. Para preparar el suelo se ha utilizado una retroaraña procedente de Asturias, una maquinaria capaz de operar en pendientes pronunciadas y zonas rocosas.
Los trabajos se han planificado con el máximo cuidado para proteger la biodiversidad. No se ha actuado en las áreas donde habita el Jasminum fruticans, la única población conocida en Balears, y se han respetado los elementos etnológicos y los antiguos cultivos del entorno.
El proyecto también pretende mejorar la retención de agua, reducir la erosión y favorecer la biodiversidad. Los nuevos bosques ayudarán a proteger el terreno, reducir el riesgo de inundaciones y capturar dióxido de carbono, contribuyendo así a frenar la desertificación y a mejorar la calidad del aire.
Promoción de actividades de voluntariado y educación ambiental
Además, el convenio con la Fundación TUI Care Foundation incluye otras actuaciones, como la mejora de reforestaciones anteriores con la incorporación de más de 2.000 ejemplares, principalmente de encina, y trabajos selvícolas. También contempla la recuperación de hábitats litorales en Son Real y la promoción de actividades de voluntariado y educación ambiental, con la elaboración de materiales divulgativos y la instalación de señalización interpretativa en el Parque Natural.
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