La III edición de la Noche de las Iglesias abrirá varios templos de Palma y la part forana este viernes, 20 de octubre. Un evento organizado por el Obispado de Mallorca y la Fundació Amics del Patrimoni. El presidente de la Fundació, Joan Guaita, y el vicario episcopal de Patrimonio Histórico y Cultural, Mn. Francesc Vicens, han explicado que la Nit de les Esglésies es una iniciativa que en Mallorca se realizó por primera vez el año 2019. Entonces siguió el ejemplo de otras ciudades europeas. En las dos primeras ediciones ha tenido un gran éxito con participación de centenares de personas que han acudido a la cita.
Entre las 20:00 y las 23:00 del viernes, las iglesias que participen este año permanecerán abiertas, iluminadas solo por la luz de las velas y en silencio. Se trata de poner las iglesias a disposición de la gente de una forma diferente al resto del año. La iniciativa, ha explicado el vicario, quiere crear una experiencia “de austeridad y contemplación del patrimonio, desde una perspectiva diferente, con ojos distintos, más estéticos y originarios, tal como eran y como habían sido pensadas las iglesias”.
Por su parte, Joan Guaita ha destacado que se trata de una oportunidad para “mimetizarse y dejarse seducir por la belleza de nuestro patrimonio religioso y artístico”, y ha añadido que esta iniciativa “permite, una vez más, poner en valor el esfuerzo de conservación”.
Templos abiertos en la Noche de las Iglesias de Mallorca
Las iglesias que vuelven a participar son, en Palma: Sant Felip Neri, basílica de Sant Francesc, e iglesia conventual de la Mare de Déu del Socors. En la part forana: en Santanyí, la capilla del Roser; en Petra, el convento de Sant Bernadí; en Felanitx, el convento de Sant Agustí; la iglesia de Sant Jordi de Pollença; y el convento de Sant Vicenç Ferrer en Manacor. Las iglesias que se han incorporado este año son Sant Cristòfol de Biniali; el convento de la Caritat de Sencelles; y la parroquia de Sant Bartomeu de Sóller.
Aunque las visitas durante la Noche de las Iglesias son libres y sin límites de aforo, en Palma se propone empezar a las 20:00 en Sant Felip Neri. Para así continuar en Sant Francesc y acabar en el Socors, yendo en grupo. Así lo ha explicado Mn. Francesc Vicens, quien ha dicho que se necesita un rato para que los ojos se acostumbren a la oscuridad, a la luz natural y para que “el ruido que todos llevamos en nuestro interior se vuelva silencio”. La experiencia quiere “propiciar la espontaneidad” y permitir que “sin ninguna intervención o dirección, este espacio, su belleza, haga lo que tenga que hacer dentro de uno mismo, efecto que será diferente en cada persona”, en definitiva, ha concluido, que “el silencio y la luz hablen por sí solos sin necesidad de añadir nada más”.
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