Bajo el lema “Trabajadoras del Hogar. Trabajadoras Invisibles”, cerca de medio centenar de personas han participado en una marcha convocada por Càritas Mallorca en Palma para visibilizar la realidad del colectivo de empleadas del hogar. A pesar de algunos avances en sus condiciones laborales, muchas trabajadoras internas siguen enfrentando situaciones de precariedad y vulnerabilidad.

empleadas del hogar

Imagen de la manifestación por los derechos de las empleadas del hogar a su llegad a Cort. Foto: Càritas Mallorca.

La caminata comenzó en la sede de Càritas, donde se repartieron dorsales, y recorrió varias calles del centro hasta llegar a la plaça de Cort. Allí, cinco trabajadoras del hogar leyeron un manifiesto con diversas reivindicaciones.

Principales demandas de las empleadas del hogar

  • Mejoras para las trabajadoras internas, con una limitación de la jornada laboral, ampliación del tiempo de descanso diario y un reconocimiento salarial justo.
  • Clasificación profesional, que diferencie las tareas domésticas de los cuidados a personas.
  • Condiciones de contratación dignas, con contrato formal, alta en la Seguridad Social por las horas reales trabajadas, salario justo, derecho a vacaciones y permisos.
  • Medidas de apoyo a la contratación, tanto para empleadores particulares como para empresas, adaptadas a sus necesidades.
  • Mayor control y vigilancia del cumplimiento de la normativa laboral, equiparando los derechos de las empleadas del hogar con los del régimen general.

Realidades laborales del colectivo

Entre las principales problemáticas que enfrentan las empleadas del hogar, destacan las jornadas laborales superiores a las 40 horas, la disponibilidad de 24 horas para las trabajadoras internas, la falta de respeto al descanso diario de 2 horas, la obligación de asumir solas el cuidado de personas con alta dependencia, y la dificultad de acceder a información sobre sus derechos debido a la aislación en el trabajo.

Durante el acto, se recordó la importancia del sector en la economía y se destacó la proclamación del 30 de marzo como Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar por parte de Naciones Unidas. La marcha en Palma se enmarca dentro de una serie de actividades organizadas por Cáritas en todo el país para sensibilizar a la sociedad y mejorar la situación laboral de estas trabajadoras.