La economía de las Illes Balears creció un 3,2% interanual en el primer trimestre de 2024, según el informe “Momento Económico de las Illes Balears” de agosto, publicado por la Dirección General de Economía y Estadística. Este dato está en línea con la revisión al alza del crecimiento económico para 2024 realizada por el Govern de les Illes Balears en julio, que también se sitúa en el 3,2%.
Durante el primer trimestre, las Pitiüses lideraron el crecimiento económico con un aumento del 4,8%, seguidas por Mallorca con un 3,1% y Menorca con un 2,7%.
El sector turístico, al alza
Los resultados del sector turístico en el primer semestre de 2024 reflejan una mejora tanto en términos de volumen como de calidad. El gasto medio por turista creció un 5,4%, mientras que el gasto diario aumentó un 7,6%, alcanzando los 1.073 euros por persona y 185 euros diarios, respectivamente.
En cuanto al volumen de turistas, el primer semestre registró la llegada de 7,68 millones de visitantes, un 7,8% más que en el mismo periodo del año anterior. Las pernoctaciones también aumentaron un 5,5%, alcanzando un total de 44,6 millones.
Solidez del sector servicios
Las ventas del sector servicios demuestran la solidez de la facturación en los subsectores de hotelería, actividades administrativas y servicios profesionales. Por el contrario, el comercio experimentó un retroceso en su cifra de negocios respecto a junio de 2023. En el sector de la construcción, el número de viviendas visadas tuvo un ligero descenso, aunque se mantiene en niveles comparables a los de 2019. La producción industrial, tanto en las Illes Balears como en el resto de España, registró una caída en junio. No obstante, en términos generales, Balears y La Rioja lideraron el crecimiento de los servicios durante ese mes.
Mercado laboral
En el ámbito laboral, la afiliación media en Balears continúa creciendo y se aproxima a los 640.000 trabajadores, un 3,1% más que en 2023. Todos los sectores contribuyeron al aumento del empleo, destacando especialmente el sector servicios, que con un crecimiento del 3,4% alcanzó cifras históricas.
Por último, la inflación general se moderó en julio, influenciada principalmente por la disminución en los precios de la vivienda y los alimentos. La inflación subyacente también mostró una tendencia a la baja, situándose por debajo de la tasa general.
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