La Mesa de Diálogo Social de las Illes Balears, presidida por la presidenta del Govern, Francina Armengol, prorrogó hasta el 31 de marzo las prestaciones extraordinarias para los trabajadores fijos discontinuos de las Illes Balears que todavía no se hayan incorporado a su puesto de trabajo y para trabajadores en ERTE por COVID. Esta prestación ya se aprobó el pasado mes de septiembre, y ha permitido que se pudiera cobrar desde octubre de 2021 hasta finales de febrero de 2022. La medida podrá beneficiar a unos 60.500 fijos discontinuos de las Illes Balears que todavía no se han incorporado a su puesto de trabajo, de los cuales 49.980 están en Mallorca, 5.570 en Menorca y 13.692 en Pitiusas.
El acuerdo propuesto por el Ministerio a los agentes sociales y económicos supondrá una transferencia de rentas equivalente a 54 millones de euros, que se suman a los aproximadamente 380 ya aportados desde el mes de octubre hasta enero.
El portavoz del Govern y conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, ha valorado en rueda de prensa esta propuesta y que se alargue “una medida que se diseñó como específica para las Illes Balears” y que “ha servido para proteger a todo el tejido productivo, no solo a los trabajadores y trabajadoras, también a las empresas”.
Con esta nueva prórroga, habrán sido seis meses de prestación extraordinaria desde la finalización de la última temporada turística. Hay que recordar que, en 2021, la prestación ha abrazado un periodo de cuatro meses. Con este nuevo acuerdo, la prestación se extenderá un mes más (hasta finales de marzo) y enlazará así con el inicio de la temporada turística, lo que ha supuesto un escudo social hasta el invierno de 2023.
También se prorroga la prestación por ERTE
Los trabajadores en ERTE por causa COVID continuarán beneficiándose también de las prestaciones que venían cobrando durante este invierno, si bien el número de personas beneficiarias será menor, puesto que la reactivación económica ha permitido que, progresivamente, muchas empresas vayan recuperando su actividad. Como referencia, según el último dato disponible, a finales de enero había 5.839 personas en ERTE en las Illes Balears, cuando en el peor momento de la pandemia llegaron a haber 152.000.
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