Las reservas hídricas de Balears cerraron el pasado mes de junio con un preocupante descenso, situándose en el 48% de su capacidad total, tres puntos por debajo del mes anterior (51%) y dos puntos menos que en junio de 2024 (50%). Por islas, Mallorca ha pasado del 52% al 50%, Menorca ha bajado del 48% al 42%, y Eivissa desciende del 36% al 34%. El retroceso de las reservas pone de manifiesto una tendencia negativa sostenida, agravada por la falta de precipitaciones y las altas temperaturas. Según el Govern, todo apunta a que las reservas hídricas de Balears seguirán disminuyendo durante el mes de julio, lo que podría agravar aún más la situación en los próximos meses.
En estos momentos, el escenario de sequía se extiende casi por completo por el territorio balear. Actualmente, el 98,4% de las Unidades de Demanda (UD) se encuentra en situación de prealerta, mientras que solo Formentera -que representa el 1,6% del territorio- mantiene el nivel de normalidad. Nueve UD han registrado un empeoramiento en el índice de sequía: Menorca, Manacor-Felanitx, Migjorn, Es Pla, Palma-Alcúdia, Tramuntana Norte, Tramuntana Sur, Eivissa y Formentera. Únicamente Artà muestra una ligera mejoría.
El índice global de la Demarcación Hidrográfica se mantiene en 0,400, el mismo valor que hace un año, aunque sensiblemente inferior al registrado en 2023 (0,503), lo que refuerza la tendencia descendente de los indicadores hídricos.
Junio más seco desde 1961
La situación se ha visto agravada por unas condiciones meteorológicas extremadamente adversas. Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), junio fue un mes muy seco en las Illes Balears, con una precipitación media de apenas 0,1 litros por metro cuadrado (l/m²), muy por debajo de los 15,3 l/m² habituales. Se trata del mes de junio más seco desde que comenzaron los registros en 1961.
Desglosado por islas, en Mallorca se han acumulado solo 0,2 l/m² (frente a los 16,7 l/m² habituales), en Menorca 0,1 l/m² (vs 13,3 l/m²) y en Eivissa y Formentera no se ha registrado ninguna precipitación (0,0 l/m²).
A la escasez de lluvias se suma un aumento significativo de las temperaturas. Junio fue extremadamente cálido, con una media de 25,3 ºC en el conjunto del archipiélago y una anomalía positiva de +3,3 ºC respecto a lo habitual.
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